
Mira, lo típico en esta sección es contarte una bonita historia de superación con final feliz tipo pelicula de Hollywood.
Debería estar relacionada con lo que buscas en mi web, para intentar empatizar contigo y que quieras comprar mis servicios de Redactor SEO. Podría hacerlo, tengo más de cuarenta tacos y he superado «cosillas», pero ni me apetece ni me va el rollo.
Aprovechar las experiencias para mejorar o ayudar a otros está muy bien, pero ya me aburre que todo dios las utilice para vender. Al final ya no sabes si son historias reales o simple storytelling para ganar pasta.

Si buscabas una historia chula la tendrás, con final feliz y todo porque casi la palmo. Eso sí, ni la escribí para esta web, ni viene a cuento con la redacción seo, ni te va a servir de mucho en tu web. Pero bueno, es real, mola y algo de ella aprendes fijo.
Si quieres algunos datos reales sobre mi también los tienes, la historia más abajo:
- Me llamo Jonathan Pérez
- Nací y vivo en Galicia, por ahora
- Soy introvertido y muy perfeccionista (eneatipo uno dicen)
- Suelo ser demasiado directo y sincero
- Estudié electrónica industrial
- Fui a la universidad pero no duré mucho
- Llevo desde los 18 años trabajando
- He dejado todos mis trabajos por voluntad propia.
- En 2007 aprobé una oposición para funcionario y dejé el puesto en 2017
- A principios de 2016 no sabía que era wordpress
- Me casé con poco más de veinte años y me divorcié cerca de los treinta.
- Tuve una hija en 2005 que me salvó la vida en 2016, aunque ella no lo sabe.
- También tengo un pandemials que se llama Máximo Patroclo
- Me encanta el Pádel, tanto que tengo título de Monitor
- Me encantan los animales pero odio los bichos
- Odio la mierda de la política, la telebasura, la infoxicación, etc..
- Le tengo bastante fobia a las redes sociales y el postureo
- Conduzco moto desde los 13 años
- He saltado desde una avioneta pero tengo miedo a volar en avión
- Me mola el cine, sobre todo ciencia ficción: Matrix, Origen, Interstellar…
LA OLA QUE ME MATÓ
Esto es lo que me salió de dentro hace unos diez años, cuando sucedió la historia. No he revisado ni una coma para publicarlo aquí.

Son aproximadamente las 16:30 del Jueves 17 de Noviembre, y me encuentro en Ericeira, reserva mundial del surf, con mi chica. Estamos en lo alto de un acantilado, divisando la famosa playa de Ribeira d’Ilhas. Desde aqui arriba puedo verlo todo.
Hay unas olas considerables, poco ordenadas y que rompen como a cámara lenta, sin abrir de forma violenta y formando grandes espumas. Veo unos cuantos surfistas pillando algunas olas y no parece que sea muy complicado, es más, da la sensación de que las olas son algo cortas e incluso fofas. Durante un rato me fijo en uno en concreto, uno que rema hacia la rompiente, pero que tras unos minutos de lucha contra las espumas, desiste y sale por la playa contigua.
Nos metemos en el coche y bajamos hasta la playa, mientras voy pensando si meterme después de cuatro horas de coche. Aqui abajo se respira ambiente surfero, como los días que patos está lleno. Hay bastantes coches y surfistas, los cuales empiezo a examinar para intentar saber si son todos expertos o tambien se menten principiantes. La verdad que hay bastantes con algo de sobrepeso, otros mayorcitos y alguno con tablones, por lo que creo que no puede ser para tanto la cosa. Yayi me anima y me dice que me meta, que para eso estamos aquí, así que las pequeñas dudas que tengo se disipan y decido intentarlo…
Con bastante calma me enfundo el neopreno, mientras observo todo a mi alrededor, ya que estoy en zona desconocida y quiero ir con cuidado, cojo mi tabla y me voy caminando lentamente hacia la playa.
Ya estoy en la orilla, y desde aquí todo se ve diferente. Veo mucha espuma, algún surfista remontando y que la rompiente está muy lejos. Miro y remiro todo lo que puedo, situación de las diferentes rompientes, zonas donde están los surfistas, rocas visibles, zona a elegir para entrar, etc….
La playa es bastante pequeña, y basandome en mi poca experiencia decido entrar por el medio de la misma. Me meto tranquilamente en el agua, que por suerte no está muy fría, y camino despacio y examinando las espumas que se dirijen hacia mi.
Una vez que el agua me llega a la cintura, decido tumbarme sobre la tabla para empezar a remontar con calma, no quiero cansarme antes de tiempo. Remo despacio pero firme, y cuando llegan las espumas hago mis seudopatitos para pasarlas por debajo.
Las espumas tienen más fuerza de la que esperaba, y una de ellas me levanta la tabla golpeandome la nariz. El golpe es pequeño y yo sigo remontando poco a poco con más cuidado.
Después de unos cuantos minutos, pocos, sin darme ni cuenta me encuentro totalmente desviado a la izquierda, dónde están las rocas que dividen la playa de otra pequeña cala. Me pongo algo nervioso viendo las rocas cerca y empiezo a remar con más ímpetu már adentro.
La corriente es fuerte y no me deja avanzar, y yo empiezo a estar cansado, a la vez que bastante acojonado viendo que me voy hacia las rocas. Como no consigo avanzar intento nadar arrastrando la tabla con el invento, pero después de unas cuantas brazadas me doy cuenta que es inútil ir contracorriente.
Me subo a la tabla, estoy super nervioso y acojonado mirando a mi alrededor y a la orilla, y me empiezo a plantear todas las opciones que tengo, mientras ruego a dios que me deje salir de allí (Y eso que no creo en él, jajaja).
Descarto la opción de dejarme llevar hasta las rocas e intenar salir por ellas y me pongo a remar en paralelo a la costa, hacia la zona de la cala. Ahora sí me muevo, y estoy llegando a la altura de la calita, libre de rocas para poder escapar de esta mierda….
Una vez que estoy frente a la cala me empiezo a tranquilizar, cambio el rumo hacia ella y remo con ganas pensando que me voy a librar de morir aqui. Sin embargo, parece que no va a ser tan fácil, me estoy cansando y no avanzo, ahora la corriente me lleva mar adentro.
Creo que no voy a poder salir por aquí…..necesito descansar y pensar como salir de este infierno de agua…. y la única forma de ganar un poco de tranquilidad es remar mar adentro y superar la rompiente, así que me pongo a ello…..
Me paso bastantes minutos remando hacia mi destino y por el camino me voy encontrando otros surfistas que no se ni de donde salen. Todos vamos esquivando las olas que rompen, que por suerte no es muy complicado porque no son largas, y seguimos aproximadamente la misma dirección, con una remada lenta y con pinta de no poder con los cojones. Yo realmente no puedo conmigo, pero aún así remo más lejos que nadie para estar más seguro, ya que si me cae una ola encima en estos momentos no tendría fuerzas para remontar otra vez.
Estoy muy lejos de la orilla, las olas son grandes y lo único que quiero es salir del agua. Durante varios minutos estoy en medio de la nada, entre dos grupos de surfistas separados unos cincuenta metros, descansando y pensando como coño voy a salir. En mi cabeza se mezclan muchas cosas… recuerdo el coche de policía marítima estacionado en el aparcamiento, pienso en Yayi, escucho una avioneta y llego a pensar que me van a ayudar, etc….
Empiezo a tener frío y a pensar que debería pedir ayuda, y me pongo remar hacia los tres surfistas que hay en la derecha de la playa. Mientras me acerco voy pensando que les puedo decir y uno de ellos desaparece surfeando una gran ola de derechas…. Ya estoy a escasos metros y les saludo:
Yo.- Hola.
Surfista.-Hola.
Yo.-Español?
Surfista.-No. Ingles (Venga no me jodas, ni siquiera portugués, menuda suerte)
Yo.-Para salir de aqui?… go out here?. I´m a beginer
Surfista.- …bigest… (Sólo entiendo algo como que son olas grandes)
Yo.- Yes, is big for me, I need go out. Left o right?
Surfista.- ……..right……. (me habla al tiempo que indica con la mano)
Yo.- Ok. Thanks.
Una vez terminada la conversación, creo que lo tengo más o menos claro y me decido a partir. Cojo aire y me pongo a remar en dirección a la playa. El otro surfista me dice algo que no logro entender y le doy las gracias…. Ahora llega lo jodido, entrar en la zona de rompiente y rezar para que me empuje hacia la orilla….
Llevo ya unos diez metros remando y viendo atrás, para que no me pille ninguna ola por sorpresa, cuando parece que empieza una serie de olas que romperán cerca de donde estoy. Se acerca la primera ola, bastante grande y de derechas como todas las que salen en esa zona….. y yo, pobre iluso, todavía me planteo si podré pillarla y salir surfeandola librándome así de posibles hostias.
Sigo remando ,sin mucha fuerza, mientras observo como la ola se me acerca al tiempo que empieza a romper por mi izquierda. Entonces hago un amago de remar con ganas, pero no tengo ni fuerza ni la decisión necesaria y la ola me pasa por debajo sin apenas impulsarme …… Ya viene la siguiente, pienso que para esta estoy mejor colocado y que lo puedo volver a intentar… se repite lo de antes, remo sin fuerzas y me pasa por debajo empujandome apenas unos metros.
Ahora sí estoy en la zona de peligro, vienen las siguientes olas de la serie y yo estoy justo donde van a romper…. Cojo todo el aire que puedo, veo hacia atrás y me agarro a la tabla con todas mis fuerzas, la ola está llegando y yo rezo para que me empuje con fuerza pero sin más consecuencias que mandarme hacia la orilla tumbado sobre la tabla…..
En ese momento cierro los ojos…la ola llega y me levanta con tanta fuerza que salgo por delante de la tabla disparado, me sumerge bajo el agua y me mantiene durante unos segundos dando vueltas como un muñeco.
En cuanto puedo salgo a la superficie, estoy jadeando, me falta el aire…entre el pánico y el cansancio mi cuerpo consume demasiado oxígeno para aguantar bajo el agua. Busco desesperado la tabla para tener algo a que agarrarme, al tiempo que me entran ganas de llorar y de gritar pidiendo auxilio. Sin embargo, no me puedo permitir ninguna de las dos cosas, porque otra ola se me viene encima y es lo único que ahora debe preocuparme.
La ola está practicamente encima mía, retraso un poco mi posición en la tabla para intentar evitar lo de antes y cojo todo el aire que los jadeos me permiten…. agarro la tabla con todas mis fuerzas, cierro los ojos al tiempo que rezo……llega la ola y…. me vuelve a levantar de forma que salgo despedido por delante de la tabla, me sumerge con fuerza mientras doy una voltereta y…………….. en ese momento, justo cuando estoy dando vueltas bajo el agua, decido rendirme, rendirme y aceptar que voy a morir en esa ola, que no tengo fuerza para seguir peleando y que el aire se me va a terminar antes de que pueda emerger.
En esos segundos eternos que estoy a merced de la ola, y en los que he aceptado mi muerte, decido abrir los ojos….no entiendo porque, pero no quiero morime con los ojos cerrados, quiero verlo, quiero saber dónde estoy…..hasta que lo veo, lo veo todo marrón y revuelto, me siento perdido y el miedo me hace cerrarlos otra vez.
Entonces, sin esperarlo, vuelvo a emerger, jadeando, acojonado y totalmente deshecho, pero esperanzado porque estoy bastante más cerca de la orilla. Ahora las olas que se acercan no són más que una espuma, una espuma que aunque tenga fuerza creo que me va a llevar a la orilla sin sobresaltos.
Me preparo sobre la tabla, esta vez mucho más retrasado para evitar sorpresas, me agarro fuerte y espero lo que tenga que ser….La espuma se acerca, cada vez la veo más grande, pero estoy seguro que no tiene nada que ver con lo anterior….me empuja y….. salgo deslizandome sobre la tabla a una velocidad increíble.
La espuma me ha empujado bastantes metros y ya estoy cerca de llegar a la orilla.Seguro que me pillo una espuma más y estaré a salvo. Me vuelvo a preparar…llega la espuma y me empuja con fuerza otra vez…. Llevo bastante velocidad y cuando estoy a punto de encallar en la orilla me tiro hacia un lado de la tabla, y caigo sobre la arena como un saco de patatas.
Estoy en tierra firme, reventado y asustado, pero al mismo tiempo con una sensación de alivio que nunca antes he tenido. Después de una hora de puro miedo estoy vivo y sin daños físicos, y no me lo puedo creer…..
Han pasado tres días desde que salí del agua, pero una parte de mí sigue allí, en esa ola, dando vueltas bajo el agua….y cada vez que cierro los ojos lo veo, veo ese caos, ese marrón revuelto en el que acepté morir, ese marrón revuelto de la ola que me mató…..
Aquí lo dejamos… creo que ya tienes bastante info del tal Jon